El joven concejal del Partido Popular en el Ayuntamiento de San Bartolomé, Juan Rivera, fue elegido presidente de Nuevas generaciones (NNGG) de Lanzarote durante el III Congreso Insular celebrado el pasado viernes. La nota polémica del Congreso la puso Lorenzo Lemaur, que intentó sin éxito presentar su candidatura pero que finalmente decidió irse del partido al acusar a sus excompañeros de discriminarlo “por la edad”.
Juan Rivera pronunció un encendido discurso en su puesta de largo como líder de los jóvenes populares y pidió que la gente “rompa con los prejuicios respecto a la clase política”. Para Rivera, “mucha gente piensa que el PP es un partido donde se cobran sobresueldos por parte de empresarios afines o que defendemos las prospecciones solo por dinero aunque sepamos que no va a revertir en el bienestar de la ciudadanía. Hay que acabar con esas ideas locas”.
Sus compañeros de partido destacan de Rivera su gusto por la elegancia y la buena presencia. “Es dificil verlo despeinado o con arrugas en la camisa”, dice una compañera, “ y adora los pantalones de Ástrid, aunque le cueste reconocerlo”. Y es que para Rivera “la apariencia es importantísima, y hay que acabar con el prejuicio de que vestir bien es de pijos. Se puede ser progre pero tener buen gusto, como es el caso de David Beckham o Santiago Segura”.
Sobre las políticas de recortes del Gobierno, Rivera cree que “son necesarias, y hay que acabar con el prejuicio de que los recortes traen más pobreza y menos calidad de vida. Lo que pasa es que la gente de la calle pretendió vivir un poco como los ricos, y eso no puede ser, cada cosa tiene que estar en su lugar y hay que acabar con el prejuicio de que es malo que haya ricos, porque son los que mueven el mundo y generan el trabajo y todas esas cosas que me enseñaron”.