La casuística meteorológica de Lanzarote ha provocado que la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) haya decidido crear un nuevo nivel de alerta, el arcoíris, que se sumará a los tres ya existentes (amarillo, naranja y rojo).
La tromba de agua que cayó en Arrecife el lunes sin que la Aemet hubiese decretado alerta alguna ha llevado a los responsables de la Agencia a desarrollar un nivel que esté activo “en todo momento”, de cara a contemplar “los chaparrones imprevistos”, según ha comentado su presidente, Daniel Cano.
Según Cano, “todo tiene su límite. Antes nos acusaban de decretar alerta amarilla en días en los que el sol rajaba las piedras, pero eso nunca volverá a pasar gracias a la alerta arcoíris. Si vuelve a diluviar, podremos decir que lo habíamos advertido”.
La medida ha sido acogida con satisfacción generalizada, sobre todo en el sector comercial, donde algunos comercios ya publicitan sus paraguas y chubasqueros con carteles publicitarios del tipo: “¿Sabías que estamos en alerta arcoíris? Sal preparado de casa”.
Por su parte, el colectivo de gays y lesbianas ha criticado duramente la decisión de la Aemet de usar su bandera para no pillarse los dedos con las predicciones meteorológicas. “Si lo que pretende la Agencia es insinuar que los homosexuales somos personas imprevisibles, nos van a tener enfrente”, declaró su portavoz.