El primer conflicto diplomático de Paulino

Como cada septiembre desde hace ya varios años, un grupo de vecinos de Fasnia (Tenerife) miembros de la parranda El Puchero vienen a Tiagua para participar en la romería de Los Dolores. El buen rollo que hay entre ellos y la familia Martín es conocido en todo el pueblo y para la edición de 2013 deciden dar un paso más para consolidar la relación: piden el hermanamiento entre las poblaciones, que se celebra con gran jolgorio la noche del sábado 14 de septiembre entre rones, canciones y alegría. De Fasnia viene a celebrar la unión el teniente de alcalde mientras que por parte del ayuntamiento de Teguise asisten diversos representantes municipales.

Pero de pronto ocurre algo totalmente inesperado. A eso de las 00:45 horas, después de un buen número de copas y de abrazos de hermanada complicidad, un miembro de El Puchero comenta entre risas que el entrenador del Real Madrid, Carlo Ancelotti, tiene un par de huevos por mantener de suplente a Iker Casillas, “ese porterucho españolista”. La carajera se venía venir porque el comentario fue escuchado nítidamente por Andrés, vecino de Tiagua, fiel seguidor madridista y fanático de Iker.

El buen ambiente de repente se volvió gélido. Andrés le replica agriamente con un “¿Qué estás diciendo tú de Casillas, simplón?” y el incendio tardó poco en propagarse. El teniente de alcalde de Fasnia trató inmediatamente de mediar en el conflicto pero su conocida devoción azulgrana no hizo sino echar gasolina al fuego. Olivia Duque, concejala de Teguise, intentó calmar los ánimos con un “chaaacho, que somos todos canaarios”, pero más de uno ya sujetaba el timple con tintes violentos. La respuesta, de uno de El Puchero, fue: “qué tendrá que ver el atún con el betún, babieca, estamos hablando de furbo, y Casillas es un comemierda español y punto”.

El saldo de la noche fue el siguiente: seis heridos de timple y dos de guitarra internados en el Molina Orosa. La comitiva de Fasnia al completo buscando apartamento esa misma noche en Puerto del Carmen para “salir lo más rápido posible de este pueblo de mala muerte”. La declaración de hermanamiento rota a las cuatro horas de haberse firmado. Y Paulino Rivero con su primer conflicto diplomático entre municipios canarios sobre la mesa.

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