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Creado en 05 Octubre 2011 0 Comentarios

Gente desesperada

mitinperturbado

La tranquilidad habitual de la oficina de Bankia de la calle León y Castillo de Arrecife se vio interrumpida el pasado viernes a las diez de la mañana cuando J.M.V., de 41 años, sacó un megáfono de su mochila y se puso de pie sobre los asientos para dar un mitin.

Los clientes del banco hicieron rápidamente un corro a su alrededor y aplaudieron a rabiar al escuchar propuestas como “mejorar la productividad en los centros de trabajo”, “reforzar los mecanismos de gestión indirecta de servicios públicos” o “consolidar el déficit cero para la salvación del planeta”.

Vicente Lorenzo, cliente del banco que tenía el 76 para ventanilla, tuvo que volver a coger número porque de la emoción se le había pasado, y comentó a este medio: “nunca había visto nada igual. No es que le haya entendido mucho, pero este hombre se expresa de maravilla. Y para alguien con problemas de oído como yo, tener el megáfono a veinte centímetros siempre se agradece, porque hacía tiempo que no escuchaba algo tan clarito”.

Igual de exultante se encontraba otra clienta, Sebastiana Morales: “Hasta me duelen las manos de aplaudir. Este hombre es un genio. A mí nunca se me habrían ocurrido esas cosas que estaba diciendo, y sobre todo le ponía una pasión tan grande que imagino que todas esas soluciones deben de ser verdad. A ver si hay suerte y le ficha el PSOE o el PP para poder votarle. Eso sí, se tenía que haber acordado de traer unas garbanzas o algo”.

Una ambulancia del servicio de emergencias tuvo que atender a J.M.V. por un problema de afonía, y otra ambulancia lo hizo por algunos problemas mentales. Sobre la afonía, J.M.V. comentó que la causa había sido un entrenamiento insuficiente, mientras que sobre la cuestión de salud mental aportó algunos datos curiosos: “Mi vida estaba predestinada a ser diferente. Mi padre nació en El Cuchillo y mi madre es de La Degollada, así que desde pequeño vi mucha violencia en casa, y eso me ha convertido en un activista social convencido”.

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