Próximos a consolidarse como el dúo humorístico del momento, los propietarios del puerto deportivo Marina Rubicón sigue proporcionando horas de risa a la concurrida audiencia que sigue sus andanzas judiciales por la prensa.
La última parida de estos cracks del cachondeo surrealista y el despiporre la soltaron la semana pasada al declarar ante el juez que no sabían que el barco del ex alcalde de Yaiza, el amigo Reyes, estuviese atracado en su puerto.
Según fuentes poco solventes, Buenafuente ya se ha puesto en contacto con este par de cachondos para ofrecerles trabajo en su programa.