El sector farmacéutico, de luto

“Este hombre ha hecho mucho por la isla y por la Justicia, pero también por el negocio farmacéutico”. Esas han sido las primeras palabras del vocal representante de Lanzarote del Colegio Oficial de Farmacéuticos de Las Palmas, José Reguera Ramírez, tras conocerse que el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) ha apartado a César Romero Pamparacuatro como juez instructor del caso Unión.

Según Reguera, “desde que estalló la operación Unión en mayo de 2009, la demanda de astringentes se disparó en todas las farmacias de la isla. La venta de antidiarreicos, antieméticos, anticolinérgicos y antiespasmódicos se multiplicó por veinte y tuvimos incluso que contactar con las empresas farmacéuticas para que incrementaran la producción. Fue un auténtico boom”.

“Un caso muy particular”, explica el vocal lanzaroteño, “fue el de la farmacia de Fabián Martín, que se quedó sin astringentes desde la misma tarde del 25 de mayo de 2009 y hasta la fecha no ha vuelto a disponer de existencias. En el gremio se hace la broma de que con la familia que tiene seguro que lo destinan todo a consumo interno y no les queda nada para vender”.

Para finalizar, Reguera confirmó el rumor de que el Colegio de Farmacéuticos se está planteado querellarse contra el CGPJ: “Una cosa es que puedan haber intereses políticos detrás de la decisión, pero en plena crisis creemos disparatado e irresponsable dejarnos sin esta fuente de ingresos tan importante. En esta isla ya todo el mundo intuye cómo va a terminar este follón de corrupción, pero no había necesidad ninguna de perjudicar económicamente a un sector clave como el nuestro”.

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