En 2003, uno de los eslóganes utilizados en la campaña electoral por el PIL fue “la isla, organizada”.
Tan organizada la tenían que desde que metieron a su querido preso político en la cárcel, saltaron por la borda a los brazos de empresarios mejor posicionados, y allí estaban los de Coalición Canalla para darles cobijo.
Todo está atado y bien atado. Los campos de golf, los parques temáticos, los puertos deportivos, el PTE “light”, el PIOT descafeinado para permitir colar más camas en 2010… si hay algo que no se le puede reprochar a Coalición Canalla es que tienen muy claro lo que quieren hacer: seguir haciendo dinero a base de cemento.